En política no hay casualidades

Dice un viejo adagio político, que los políticos iturbidenses de viejo cuño conocen y manejan bien, que en política no hay casualidades sino causalidades. ¿Por qué decimos esto? Porque esta semana se generaron dos noticias de un mismo tema que simplemente nos hacen pensar.

Verá usted. La semana que está por concluir por fin detuvieron al presunto responsable de un desfalco en lo que era el Hospital Municipal y, por otra parte, se hizo entrega a la secretaria de Salud del instrumental y equipo médico que pertenecieron a dicha institución cerrada hace casi un año. ¿Casualidad?

La historia del Hospital Municipal es digna de presentarse como tragedia griega. En tiempos de Fito alcalde, allá por el 97-2000, al médico de profesión y político por ocupación, decidió construir un Hospital público que tanta falta le hacía a San José Iturbide. Sin embargo, la propuesta del perredista encontró resistencia en el gobierno estatal panista y, en una empresa quijotesca, Arnulfo Montes decidió abrirlo a como diera lugar.

Sin embargo, pese a ser una obra de beneficio social, el Ayuntamiento no recibió un incremento en sus participaciones para mantenerlo a flote. Ese fue el inicio de su perdición.

La siguiente administración, panista por cierto, continuó con la manutención del Hospital, no sin quejarse amargamente que era muy pesado para las arcas municipales. Hasta ahí todo podríamos decir que iba bien. Sin embargo, se cometió un grave error: no se escogió a la gente adecuada para administrar al Hospital.

Uno de los designados para llevar a cabo esa tarea (decimos uno, porque hubo muchos cambios, tal parece que es ley que toda administración iturbidense haga muchos movimientos de personal) fue Manuel Castañón Basaldúa -hermano, por cierto, del actual secretario de Obras Públicas iturbidense- quien aparentemente administró mal los dineros del Hospital, fue descubierto, demandado, se dio a la fuga y finalmente, cuatro años después es capturado.

En el 2006, el Hospital fue cerrado, porque la (des) administración de Javier de la Vega, no tuvo recursos y el hospital parecía un barril sin fondo en cuanto a pérdidas de materiales.

¿Es casualidad que el presunto culpable del desfalco denunciado penalmente haya sido detenido justo cuando se iba a hacer entrega del material a la secretaría de Salud del estado del malogrado nosocomio? ¿El gobierno panista no estará preparando el terreno mediáticamente para demostrar la inviabilidad de dicho hospital y resaltar el que está construyendo el gobierno estatal? Son simples preguntas. ¿Suspicacia? Claro, en política piensa mal y acertarás.

Van las notas de Correo y El Reloj al respecto.

Ex administrador de hospital está formalmente preso

Por: Carlos García, Viernes, 23 de Febrero de 2007

Es acusado de peculado por más de 280 mp

SAN JOSÉ ITURBIDE

El ex administrador del hospital municipal de San José Iturbide está formalmente preso acusado de peculado por más de 280 mil pesos; los familiares tuvieron un acercamiento con integrantes del Ayuntamiento porque quieren resarcir el daño para que otorguen el perdón.

El jueves 15 de febrero, la Policía Ministerial (PM) arrestó en la calle Mina a Juan Manuel Castañón Bazaldúa cumplimentando una orden de aprehensión girada el 26 de julio de 2004.

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Entregan Hospital Municipal

Miguel Mejía H.

SAN JOSÉ ITURBIDE

Tras nueve meses de haber sido cerrado el Hospital Municipal, por parte de la pasada administración, el instrumental y el equipo médico serán entregados el día de hoy a la Secretaría de Salud de Guanajuato (SSG).

Asimismo, el inmueble que se construyó con recursos municipales en la administración 1998-2000 a través de un convenio podrá ser utilizado también por la SSG.

Tras haber funcionado por cuatro años y 8 meses, el Hospital Municipal prestó servicios a la población vulnerable no sólo del municipio sino de la región, y se construyó como una alternativa de salud hospitalaria, ya que en ese entonces la SSG se negó a construir un hospital, ya que se le indicó al entonces alcalde Víctor Arnulfo Montes de la Vega (hoy diputado local) que la población del municipio no era la suficiente para contar con un Hospital General.

Por lo que con apoyo del Ayuntamiento se determinó la construcción del nosocomio municipal, el cual tuvo un costo de 4 millones de pesos y fracción, mismo que inició funciones a mediados del año 2000.

Sobre la entrega a SSG, la regidora Evangelina Ramírez Martínez, quien es secretaria de la Comisión de Salud, indicó que desde que se asumió el gobierno en octubre del año pasado, se les informó que la SSG estaba requiriendo “la donación, no tanto del inmueble, sino más que nada de todo lo que hay, de todo el inventario que en el momento de cerrar se tiene. Y en su momento la Comisión de Salud corroboró de manera física cuales eran los aparatos e instrumentos, mobiliario y todo que podía ser donado precisamente”.-

Antes de ello, dijo, se revisó que los Centros de Salud del municipio contaran con el equipo suficiente, de no ser así les donarían directamente parte del equipo, pero dicha comisión confirmó que no les hacía falta ese tipo de equipo, ya que se incluye instrumental de quirófano y éste nos e ocupa en los Centros de Salud, por lo que se determinó entregar el equipo completo a la SSG.

El día de hoy, miércoles 21 de febrero, se hará “entrega oficial” a la SSG.

No incluye inmueble

La regidora aseguró que la donación no incluye el inmueble, sino que simplemente se firmaría un convenio para que la SSG use el inmueble.

Dejó en claro que no se trata de una donación del edificio, además de que no se condicionó la entrega, aunque sea por convenio a la SSG, debido a la construcción del Hospital General que continúa actualmente en proceso en el municipio.

Por otra parte, al haberse cerrado el Hospital Municipal, Evangelina Ramírez destacó que al no haber una opción hospitalaria para la población de escasos recursos, el Centro de Salud absorbió todas las atenciones que se prestaban en el nosocomio municipal.

Antes de concluir, la regidora consideró que “siempre fue un error el combinar que estuviera Centro de Salud y Hospital Municipal (juntos), entonces, o se es una cosa o se es otra”, por lo que “es un espacio que tiene que definirse para qué tiene que ser, específicamente. No se puede combinarlo comos e había pretendido, puesto que ni atiendes a una población ni a otra y el lugar no es suficiente físicamente”.